Bajo el paraguas de un acuerdo que el Mercosur firmó con ese país en la década del ‘90, el Gobierno de Mauricio Macri procura profundizar el intercambio. El objetivo también es político: se trata del principal socio de la Alianza del Pacífico un espacio al cual el Gobierno de Cambiemos ve como una llave para el comercio con Asia.
Esta semana el ministro Dante Sica, junto al secretario de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería, Horacio Reyser, y la secretaria de Comercio Exterior, Marisa Bircher, estuvieron en México. Se reunieron con la subsecretaria de Comercio Exterior, Luz María de la Mora y el jefe de la Unidad de Negociaciones, Cesar Remis. Se trata de un primer encuentro de tipo político que tiene el fin de reabrir negociaciones que quedaron frenadas hace un año cuando el presidente era Enrique Peña Nieto.
Se destaca que “el objetivo de estas negociaciones es mejorar las condiciones de acceso al mercado mexicano, en especial para el sector agroindustrial, al mismo tiempo que se busca mantener un equilibrio en la relación comercial bilateral que incorpore las realidades de todos los sectores”. También se pretende incorporar disciplinas como el comercio de servicios, comercio electrónico, inversiones, y contrataciones públicas, que no estaban en los acuerdos iniciales.
Argentina y México tienen firmado un Acuerdo de Complementación Económica (ACE N° 6) que regula el intercambio general y el ACE 55 que hace lo propio en el sector automotriz. Para el ministerio de Producción, el objetivo es abrir puertas para vender autos, alimentos y servicios basados en conocimiento.
Luego de que Mauricio Macri decidiera con el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, “flexibilizar” las normas del Mercosur, el Gobierno potenció las conversaciones con México. Podría ser una fórmula para futuras negociaciones con otros países o bloques comerciales.
